La patronal valenciana ha dado un paso al frente y ya señala abiertamente al Gobierno de Pedro Sánchez como el culpable de la asfixia económica de la Generalitat que encabeza Carlos Mazón y que se deriva en dificultades para abonar facturas a sus proveedores. El presidente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), Salvador Navarro, es claro al respecto y avisa: "espero que no sea una táctica política para ahogar a esta comunidad porque es ahogar a una parte importante de los españoles".
Es poco habitual que empresarios como Navarro, que también es vicepresidente de la CEOE, se pronuncien en estos términos tan contundentes, pero la situación en la Comunidad Valenciana comienza a ser muy preocupante y los impagos de la istración autonómica, frecuentes.
La cuenta 413 –la que refleja los acreedores por operaciones pendientes de aplicar a presupuesto y recoge las obligaciones derivadas de gastos realizados o bienes y servicios recibidos– crece como la espuma y ya suma 1.455 millones de euros.
Múltiples damnificados por los retrasos
Los perjudicados son empresarios valencianos que se encargan de proveer a la Generalitat en el ámbito sanitario (mantenimiento, ambulancias, comedores) y que representan el 79% de esa deuda comercial. También los servicios sociales y los proveedores del sector educativo se ven muy perjudicados por estos pagos que el Gobierno valenciano no puede afrontar.
Salvador Navarro tiene claro que en la coyuntura actual, con el esfuerzo económico que ha habido que realizar para la reconstrucción tras la dana, la sensibilidad del Gobierno de España tenía que ser mucho mayor.
Tras el acto al que ayer fue convocado en el Palau de la Generalitat por Carlos Mazón –junto a la Asociación Valenciana de Empresarios; el Consejo de Cámaras de Comercio; ATA; entidades empresariales proveedoras de la Generalitat y el sindicato agrario AVA-ASAJA– Navarro era claro y lamentaba que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, no ha venido a Valencia después de la dana.
El presidente de la patronal valenciana –que acudió brevemente al encuentro con Mazón porque le coincidía con el congreso de CC.OO del País Valencià– resta credibilidad al argumento de Montero de que el FLA extraordinario no se aprueba porque no hay Presupuestos Generales del Estado. "Otras veces sin Presupuestos, sí ha habido FLA", recuerda.
La garantía del FLA extraordinario no existe
Su posicionamiento en un frente común con el Gobierno valenciano, en esta cuestión, no es aislado porque nadie tiene ya la certeza de cobrar en un horizonte razonable sin la garantía que suponía el pago del 75% del FLA extraordinario en el mes de julio.
Mazón es claro con los proveedores y les dice abiertamente que la Generalitat Valeneciana está en una situación muy difícil para afrontar los pagos porque la desactivación del Fondo de Liquidez Extraordinario les supone una merma de 2.500 millones de euros, a los que hay que sumar a los casi 900 que a final de este mes supondrá la no actualización de la entregas a cuenta. Un total de 3.400 millones de euros menos.
Obras de recuperación tras la dana, sin pagar
Un ejemplo claro de la falta de liquidez es el de las obras de recuperación en las zonas que fueron dañadas por la dana. Las empresas implicadas en esos trabajos "lo han sufragado con sus cajas porque no hemos cobrado", asegura el presidente de la Federación de Contratistas de Obras de la istración de la Comunidad Valenciana (Fecoval), José Luis Santa Isabel.
Abunda en la duda de Salvador Navarro sobre si hay intencionalidad en la actuación del Gobierno de Pedro Sánchez para asfixiar a un enemigo político como Mazón. Recuerda que "la Comunidad Valenciana es de todos" y no pertenece ni al PSOE ni al PP. Sí que eleva el tono porque los impagos están afectando a "150.000 familias a las que representamos".
Alberto Ara, presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos valenciana, –una organización intersectorial– se expresa bajo el mismo prisma porque "estamos ante una necesidad urgente porque detrás de todo esto hay empresas, empleos y los habitantes de la Comunidad Valenciana".
Peligro para las pyrmes
Recuerda que las pequeñas y medianas empresas abundan en la zona más afectada por la dana y los retrasos en las ayudas están poniendo en riesgo muchos negocios. Y los proveedores de la Generalitat que no tienen garantizado el pago de sus facturas para el próximo 30 de junio también están en grave riesgo.
La realidad reflejada por los empresarios valencianos es que la falta de ingresos previstos por parte de la Generalitat (que anualmente llegaban de manera casi automática por parte del Estado) ha dejado en una situación de debilidad a la istración autonómica pero, de rebote, está perjudicando a un tejido económico-laboral que está en precario tras el paso de la dana.