La sombra del intervencionismo se extiende entre el mundo financiero. La consulta pública que mantiene abierta Moncloa para garantizarse el apoyo social contra la opa de BBVA al Sabadell ha instalado el miedo a la intromisión política en España en nuevos intentos de fusiones en el sector bancario, según advierten distintas fuentes financieras consultadas por Vozpópuli.
La caída de los ingresos típicos por las bajadas de tipos volverá a poner el foco en entidades medianas, que necesitan tamaño para competir, pero si el Gobierno se decanta finalmente por torpedear la compra del Sabadell abrirá “un periodo de incertidumbre sin precedentes”, como indica un ejecutivo bancario que pide el anonimato. La consulta pública es inusual y no se contempla en la Ley de Competencia de 2007, que sólo permitirá al Ejecutivo intervenir por razones como el interés general o la seguridad nacional.
En el sector se apunta que todos aquellos bancos con un tamaño de menos de 150.000 millones de activos quedarán abocados a fusionarse o ser adquiridos por otros grandes. Es decir, todas las entidades que actualmente se quedan fuera del top 4 formado por CaixaBank, Santander, BBVA y Sabadell.
Dudas para nuevas ofensivas
“Se lo pensarán en próximos movimientos de integración si el Gobierno obstaculiza la opa”, ite un banquero de inversión. Unicaja, Abanca, Ibercaja y Kutxabank llevan tiempo en el punto de mira de los grandes bancos, pero los aumentos de tipos han dado oxígeno a estar entidades para continuar en solitario. Sin ir más lejos, Ibercaja acaba de relanzar su imagen corporativa con un logo que vuelve a los colores azul y rojo de finales de los años 80, cuando el modelo de antiguas cajas de ahorros se empezó a extender con fuerza en España.
Entre algunos de los principales banqueros del país se advierte además de que utilizar esta consulta como pretexto para frenar la opa sería una “señal de debilidad” ante los inversores internacionales y dañaría la imagen del sector. Lo cierto es que desde hace tiempo en el sector se critica la presencia del Estado en CaixaBank, donde conserva un 17% del capital como herencia de la compra de la rescatada Bankia y cuyo límite volvió a prolongar el Gobierno hasta diciembre de 2027. Se trata de la quinta prórroga del plazo para salir de la entidad.
“Yo preferiría que no saliera adelante”, dijo Salvador Illa sobre la opa, rompiendo la imparcialidad institucional
El Gobierno ha instalado el intervencionismo como piedra angular de su política económica, con el regreso del Estado al capital de Telefónica casi 30 años después y el intento de crear un campeón nacional en Defensa capitaneado por Indra, donde el brazo inversor de Moncloa controla el 28%. “Parece que no hay límites y ahora se ha buscado una fórmula inesperada (consulta pública) para posicionarse a favor del Sabadell”, lamenta un alto ejecutivo bancario.
El caso Talgo
También está muy presente el precedente de Talgo. La Junta de Inversiones Exteriores, órgano dependiente del Ministerio de Economía, rechazó la compra del fabricante de trenes español por parte del consorcio magiar Ganz-MaVag por poner en peligro “la seguridad nacional”. Moncloa se opuso a esta operación desde el principio por los nexos del grupo húngaro con Vladímir Putin y entre la banca de inversión se descontaba que acabarían encontrando una “fórmula” para vetar la operación, como finalmente ocurrió. En el caso de BBVA no puede vetar la opa, pero en la conocida como fase 3 del examen de Competencia, el Gobierno puede imponer condiciones más duras distintas las de competencia que hagan al grupo de La Vela dar marcha atrás en su ofensiva.
Josep Oliu, presidente del Sabadell.
“Hay rechazo social unánime”. Así de contundente se mostró ayer César González-Bueno, consejero delegado del Sabadell, en medio de la consulta pública que acaba de lanzar Moncloa para intentar torpedear la opa de BBVA. Para el banco catalán, tanto patronales empresariales, sindicatos y asociaciones de consumidores ya han advertido del impacto sobre las pymes y el empleo, que justifican una intromisión por “interés general”. Todo apunta a que el Gobierno busca garantizarse este apoyo social para frenar al BBVA.
Favor por el regreso a Cataluña
Entre los banqueros no se deja escapar el ‘favor’ de Josep Oliu para ganarse a Moncloa. Tras la opa hostil lanzada hace hoy justo un año, empezó a preparar el regreso del Sabadell a Cataluña tras sacar hace siete años la sede por el desafío soberanista. Y terminó de consumarlo este año, con su vuelta al feudo histórico y que abrió la espita a otros grandes como La Caixa y su hólding Criteria.
Un espaldarazo a la política de normalización de Salvador Illa que parece que ahora tendrá frutos. “Yo preferiría que no saliera adelante”, dijo sin ambages este miércoles el presidente de la Generalitat de Cataluña rompiendo la neutralidad institucional que suele caracterizar a este tipo de operaciones. Unas declaraciones que han levantado ampollas en el sector bancario español.
ap48
09/05/2025 10:49
Este señor nos quiere hacer retroceder 50 años, lo que hace el poder.
Pelosi
09/05/2025 12:08
Consultas, referendums, elecciones…todo está ya controlado por el Ente Electoral Neochavista de Sánchez integrado por Indra, Correos, Telefónica, Interior y el CIS! Con sus comisarios políticos: Miguel Sebastián, Pedro Saura, Carlos Ocaña, Marlasca y Tezanos…ya no hay vuelta atrás, como Maduro, Sánchez no volverá a perder una votación.
aherraiz
09/05/2025 19:32
A este Madirin le podemos aconsejar lasa siguientes consultas. 1)Cerrar las TVES publicas 2) Las subenciones a sindicatos cerradas ,que se financien con los socios 3) Lo mismo con los partidos politicos (que se financien con los afiliados) 4) Cerrar las empresas publicas deficitarias 5) Eso del empleo fijo y para siempre suprimido ,como todo quisque con contrato y si rinden que siga y si no a la calle (La Corredor de dimision nada ,despedida ) etc etc etc Hacer una consulta de algo que no es de todos eso es una mierda