La conocida como fontanera del PSOE, Leire Díez Castro, tuvo poderes para gestionar el voto postal cuando trabajó en la empresa pública Correos, entre 2022 y 2024, coincidiendo con una maratón de elecciones, entre otras las generales de 2023. Una información desvelada en exclusiva por Vozpópuli a la que rápidamente ha reaccionado el Partido Popular, que anuncia una ofensiva política en el Senado.
Después de conocer que la "fiel trabajadora del sanchismo tuvo la responsabilidad de gestionar el voto por correo", el PP ha decidido llamar a la comisión de investiación en la Cámara Alta a: Juan Manuel Serrano, expresidente de Correos, "amigo íntimo de Pedro Sánchez y jefe de Leire Díez en las elecciones de 2023, cuando esta se jactaba de su pleno control del voto por correo"; a Santiago Ferrer Puga, exdirector financiero de Correos; y a Javier Monzó Torrecillas, exdirector general de control.
Todos ellos tendrán que responder por el trabajo de Leire Díez. Lo ha anunciado este lunes el portavoz popular, Borja Sémper, en una rueda de prensa desde Génova. "Les confieso que asistimos con extraordinaria preocupación ante el hecho de que la fontanera Leire Díez, y Juan Manuel Serrano, que dejó Correos con unas pérdidas millonarias, gestionaran el voto de más de dos millones y medio de españoles en las generales", ha apuntado.
Los populares exigen "explicaciones urgentes" de por qué una "experta en uranio", en alusión a su anterior trabajo en Enusa, pasó a ser "experta" en voto por correo. "Queremos saber por qué y cómo desarrolló su actividad", ha insistido Sémper. "Es urgente que alguien explique su cometido, que alguien explique lo sucedido y que lo haga diciendo la verdad, sin mentir". Un brindis al sol. "Las esperanzas que tenemos de ausencia de mentira son exiguas", ha reconocido Sémper.
El PP, después de la exclusiva desvelada por este diario, dispara las sospecha sobre la gestión del voto por correo en las últimas generales, marcadas por una enorme demanda, ya que se celebraron en pleno periodo estival. No obstante, el portavoz ha querido matizar que una cosa son los directivos elegidos a dedo y otra, los trabajadoras que están en plantilla.
"Estamos convencidos de la pulcritud profesional de los funcionarios, no dudamos de los funcionarios, de los carteros, lo que dudamos es de la intencionalidad que gente de la talla moral de doña Leire pueda tener", ha zanjado.
Sémper: "Intensificaremos el control al Gobierno"
Sobre todas las informaciones que han salido a la luz en los últimos días y que apuntalan la tesis de una operación urdida por Díez contra la Guardia Civil y los fiscales y jueces que investigan casos de corrupción que afectan al Gobierno, el PSOE y el entorno de Sánchez, Sémper ha recalcado: "Intensificaremos el control al Gobierno ante tanta decadencia".
Además de las declaraciones en comisión en el Senado, el PP también ha registrado una batería de iniciativas en el Congreso de los Diputados. Entre otras, la petición que comparezca ante el Pleno el presidente del Gobierno.
Por otro lado, el principal partido de la oposición agita la movilización que ha convocado el próximo domingo 8 de junio en la madrileña plaza de España, para elevar la presión sobre el Ejecutivo en un momento crítico. "Todo lo sucedido es el punto definitivo de la descomposición de un partido y de un Gobierno donde es todo lo que parece: el Gobierno en guerra contra el Estado y Ferraz liderando la guerra sucia".
Para canalizar el descontento social con Sánchez, el PP ha elegido la pancarta. Y hoy, Sémper ha tratado de cargar de razones la concentración organizada por su partido: "Sánchez llegó al Gobierno con una moción de censura política y una moción de censura ciudadana le echará cuando pueda manifestarse en las urnas".
lepanto_2_0
03/06/2025 06:37
Llueve sobre mojado. Dada la trayectoria personal de «esta señora de la que usted me habla» y su comportamiento, cuando actuaba en su pueblo, junto a su pareja, influyendo (al parecer) en personas mayores para que votaran al PSOE por correo y encargándose personalmente de que así lo hicieran, según manifestaciones de una parte de los vecinos de dicho pequeño municipio; supone un claro indicio de presunta conducta fraudulenta en un proceso electoral. El resultado de dicha conducta fue entonces de beneficio personal y de su partido, lo que ya puso de manifiesto su inclinación al trapicheo político, aunque en aquella ocasión la Junta electoral cántabra no hiciera caso a las reclamaciones que se hicieran desde los afectados al respecto (¿?). Cuando no se aceptan las reglas del juego democráticas y obsesiona el poder, hasta el punto de estar en predisposición a cometer todo tipo de irregularidades y tropelías para conseguir los resultados que se buscan o interesan, las personas que así actúan se convierten en enemigas del estado de derecho y en un peligro para la propia democracia. Sánchez sabe mucho de eso. El caso de Leire Díez en Correos antes, y ahora trasladado al lodazal en que han convertido quienes nos gobiernan los "bajos fondos" de nuestra política, da pie a que proliferen estos personajes que pululan en 'cargos' con influencia política y con "padrinos" que las protegen; utilizándolas para sus fines entre bambalinas: unos fines que casi siempre son espurios e inconfesables (no queda bonito y empaña el relato que se quiere transmitir a la opinión pública). Estos personajes, como la señora Díez y afines, son, a su vez, el vivo retrato de una democracia enferma y decadente, que necesita una revitalización y una regeneración tan intensa y profunda, que es imposible abordarlas sin antes hacer una completa catarsis: especialmente intensa en los ámbitos de las exigencias éticas, morales y de honestidad en el comportamiento de los representantes públicos y de sus entornos. ¿Cuántas personas habrá en nómina no declarada en los partidos políticos de gobierno, como 'militantes sin bandera' (sin cargo político declarado), actuando en el inframundo de nuestra política para favorecer los intereses de quienes ostentan el poder y cuya actividad está impulsada por el encargo de quienes mandan en sus organizaciones políticas? El olor a podrido se hace ya insoportable. No debemos tolerar por más tiempo que la clase política nos humille de esta manera. Expulsemos la basura y mandémosla al vertedero: es donde tiene que estar. Y recuerden ... a una democracia sólo puede salvarla el pueblo. Sin acción no hay movilización y sin movilización no hay posibilidad de que se produzcan cambios. La situación política actual en nuestro país precisa de un cambio radical y profundo: requiere de una auténtica revolución. Una revolución que debe ser necesariamente cívica, pacífica y democrática; pero firme, decidida y comprometida. «Sin Revolución no hay Solución».