Diez años de misión militar española en Turquía. El Ejército de Tierra mantiene operativa una batería Patriot “en perfecto funcionamiento”, en el marco de las misiones Persistent Effort que la OTAN mantiene en su flanco este en busca de una defensa integrada aérea. Al personal español le corresponde, desde territorio otomano, el blindaje frente a cualquier amenaza que pueda proceder desde el exterior. “Nuestra misión es contribuir a la protección contra misiles balísticos”, detalla el teniente coronel Fernando García-Repáraz Pardo de Santayana, jefe del contingente.
“La unidad Patriot mantiene la misión por la que fue desplegada”, apunta el teniente coronel, en una entrevista recogida por el Estado Mayor de la Defensa (EMAD). Habla de la “protección” de Turquía frente a estas amenazas; en concreto, desde la ciudad de Adana.
“La evolución en estos diez años ha estado marcada por la maximización de los recursos y por el incremento del bienestar de nuestros militares. Y, como hilo conductor, el mantenimiento de la operatividad plena”, sostiene el jefe del contingente español en Turquía, compuesto por cerca de 140 efectivos del Ejército de Tierra. Todos ellos representan la rotación número 21 de la misión española, tras una década de despliegue.
Entre los hitos principales, destaca el traslado de la batería Patriot desde el aeropuerto de Adana a su actual emplazamiento en la base aérea de Incirlik. También el “esfuerzo constante” de cada una de las rotaciones para “asegurar la operatividad” de la batería, “mejorar la calidad de vida” y “reforzar nuestra relación con los militares” de Turquía y del personal estadounidense, teniendo en cuenta que se trata de una misión bajo el paraguas de la Alianza Atlántica.
“Prevención y detección”
En cuanto a la operatividad de los sistemas aportados por el Ejército de Tierra español, el teniente coronel García-Repáraz insiste en que “el control exhaustivo” y el “mantenimiento” de radares y lanzadores es “fundamental” para mantenerlos en el “mejor estado posible”: “La prevención y detección es clave para asegurar el funcionamiento de los diferentes sistemas y con ello el éxito de la misión”.
En este sentido, recuerda que el radar está diseñado para la detección de misiles balísticos, “con un rango amplio para la localización y seguimiento de trazas”: “Su veteranía obliga a un seguimiento minucioso de todos los subsistemas que lo componen para asegurar siempre la operatividad”.
En la entrevista recogida por el EMAD, el teniente coronel español aporta algunas claves sobre cómo es el día a día en la base aérea de Incirlik. “Tranquila y cómoda”, esboza, pero no por ello relajada: “Con un ritmo de trabajo constante y bien organizado, que son premisas necesarias para que la misión tenga una estructura y funcionamiento muy consolidados”. También manifiesta el “compromiso, tesón y esfuerzo” del contingente español.
Despliegues de la OTAN
¿Cómo se articuló la misión de la OTAN, de la que ya se ha cumplido una década de participación española? El EMAD recuerda que, como consecuencia de la crisis en Ucrania y la anexión ilegal de Crimea, en noviembre de 2013, la Alianza reforzó la seguridad en diversos despliegues de fuerzas a lo largo de la frontera este de la OTAN.
En abril del 2017, la Alianza integró todas estas fuerzas desplegadas en una operación que recibió el nombre de Persistent Effort, en la que participa España a través de diversas capacidades. Actualmente están activas la citada misión de Turquía, así como el despliegue de un radar en Rumanía, para detectar cualquier posible irrupción de aeronaves que no cumplan la normativa de vuelo internacional, y una batería NASAMS del Ejército de Tierra en Letonia.
Anteriormente también hubo una batería NASAMS en Estonia, y de forma rotatoria se participa con cazas de combate del Ejército del Aire en las misiones de policía aérea que se proyectan desde los países bálticos o Rumanía.
También en el marco de la OTAN, España aporta fuerzas terrestres en Eslovaquia – con cerca de 700 efectivos, donde se lidera el contingente internacional-, en Letonia y en Rumanía. A ello hay que sumar las capacidades navales que la Armada aporta en el Mediterráneo o en el Mar del Norte, entre otros.