El pasado 21 de mayo, la Junta de Andalucia dio luz vezde a uno de esos numerosos proyectos que durante los gobiernos socialistas, quedaron encerrados bajo llave. Ese, no es otro que el tercer gran centro hospitalario, con una superficie de 280.000 metros cuadrados, 815 habitaciones, 1.500 camas, 80 de Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), 31 consultas médicas y con el objetivo de ser un punto de referencia en la comunidad, España y Europa. Será, en palabras de la propia consejera de salud, Rocío Hernández, “la mayor obra de ingeniería civil de los últimos 50 años en la región”.
El presidente de la Junta de Andalucía y malagueño, Juanma Moreno, no se ha cortado, ha desenterrado el proyecto después de 15 años y no ha tenido problemas en desembolsar 607,5 millones de euros (822 millones de euros con IVA incluido). El Consejo de Gobierno aprobó hasta una ampliación presupuestaria de 355 millones de euros. Sin embargo, mientras en Málaga ya van en camino de tener el tercer hospital, otra gran ciudad como Cádiz acumula dos décadas esperando para la renovación del Hospital Regional, "Puerta del mar".
El contraste entre ambas provincias ha reavivado un enfrentamiento político en Cádiz, el Parlamento andaluz y ahora, la Junta quiere trasladarlo al Gobierno de España. Según el Ejecutivo de Moreno, la pelota está en el tejado del Ministerio de Hacienda, ya que los terrenos donde está prevista la construcción de este hospital, es de entidad estatal y con un precio "asequible".
12 millones de euros
La parcela, ubicada en la Zona Franca de Cádiz, está valorada en 12 millones de euros, nada que ver con los más de 600 millones destinados a Málaga. La dirección de la zona (socialista), ha reiterado su disposición a negociar una venta o incluso una permuta, pero no puede regalar el terreno sin incurrir en ilegalidad, como recuerdan desde el Ministerio de Hacienda. Sin embargo, a pesar de cinco cartas enviadas desde 2020, la Junta de Andalucía no ha respondido formalmente ni ha mostrado voluntad de adquirir el terreno, derivando ahora la responsabilidad al Ayuntamiento de Cádiz. Ahora son ellos, con Bruno García (PP) al frente, quienes deberían adquirir el suelo para luego cederlo gratuitamente a la Junta. Un movimiento que desde el consistorio ven complicado y como todo buen conflicto institucional, esperan que sea el otro el que haga el movimiento determinante.
El conflicto, a pleno
En la última sesión plenaria de esta semana, la diputada por el PSOE andaluz, Rocío Arrabal ha denunciado en el Parlamento la “nula voluntad” del Gobierno andaluz para construir el hospital en Cádiz, aludiendo a otras inversiones de la Junta como la malagueña o los 80 millones para adquirir suelo privado en Sevilla . “¿De verdad 12 millones son un obstáculo para levantar un hospital que lleva 19 años anunciado?”, se preguntó con indignación, acusando a la Junta de “maltratar” a Cádiz e instrumentalizar el proyecto con fines políticos.
Por su parte, la consejera de Salud, Rocío Hernández, insistía en la voluntad de la Junta de construir el hospital, pero que el proyecto está “bloqueado” porque el suelo sigue sin estar disponible. Fue entonces cuando hizo de manera oficial, la responsabilización del Ministerio de Hacienda por no facilitar la operación sobre el terreno y apeló a un acuerdo “a tres bandas” entre Ayuntamiento, Junta y Estado. Aseguró que, en cuanto la parcela esté disponible, comenzarán los trámites para la obra y recordó que ya existe un plan funcional del nuevo hospital, aunque ni siquiera ha sido publicado oficialmente.
Bloqueo en Cádiz
Este nivel de compromiso contrasta con el estancamiento en Cádiz. El hospital proyectado allí ni siquiera tiene garantizado el suelo, pese a que la Junta asegura tener presupuestados 500 millones para la futura infraestructura. Para el PSOE, este doble trato obedece a un cálculo político deliberado. Tanto Arrabal como el secretario general del PSOE de Cádiz, Juan Carlos Ruiz Boix, acusan a la Junta de dar la espalda a Cádiz, pero sobre todo, de utilizar el bloqueo como arma política contra el Gobierno central, especialmente contra la ministra y líder socialista andaluza María Jesús Montero.
Sin embargo, cabe recordar que los distintos gobiernos socialistas tuvieron tiempo para avanzar en el proyecto, pero lo dejaron aparcado, como ocurrió con el de Málaga y cuando Montero fue consejera de Salud de la Junta.
Incuso según el convenio original de 2008, se estipulaba que la Junta no debía pagar ni el suelo ni la construcción del hospital, ya que la financiación se preveía a través de la venta del actual solar del Hospital Puerta del Mar, operación que debía liderar la Zona Franca. El PP de Cádiz acusa al PSOE de haber incumplido este plan y rechazan que ahora se exija a la Junta lo que antes se planteaba como innecesario.
La ciudadanía gaditana contempla cómo su hospital sigue en punto muerto, sin fecha, sin suelo y con un futuro que se vuelve cada vez más incierto. Málaga cuenta los días (y los años, 6 en total) para ver levantarse una infraestructura sanitaria de vanguardia. Las comparaciones pueden ser odiosas.