Andalucía

Óscar Puente castiga a Andalucía: destina un 740% más de presupuesto para los trenes en Cataluña

El déficit en inversión ferroviaria ha pasado a ser la segunda gran exigencia de la Junta al Gobierno de España, junto con el sistema de financiación autonómico

  • Viajeros en la estación de Jaén -

La última y enésima incidencia ferroviaria registrada en Jaén este jueves ha vuelto a poner sobre la mesa algo que la Junta está utilizando este 2025 como nueva arma política. A la exigencia al Gobierno de España de renovar el sistema de financiación autonómico, ahora se le suma la denuncia del mal estado en el que se encuentran las infraestructuras ferroviarias en Andalucía.

En esta ocasión, sobre las 9:00 horas de la mañana, una vagoneta descarriló durante una maniobra en la vía general de a la estación de tren de Jaén, provocando la interrupción total de la circulación y obligando a Renfe a establecer un servicio alternativo por carretera entre Espeluy y Jaén. Si no es un accidente, es un “sabotaje”, como el del pasado cinco de mayo, cuando todos los trenes entre Madrid y Sevilla se detuvieron durante cerca de 24 horas, provocando graves retrasos entre ambas ciudades.

Esta avería se suma a una serie de problemas técnicos y logísticos que han afectado en las últimas semanas a la red de trenes de la comunidad, especialmente en la línea de alta velocidad que conecta Madrid con Andalucía. La consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos y portavoz del Gobierno andaluz, Carolina España, no ha dudado en calificar el estado actual de la red ferroviaria como “un motivo de bochorno mundial”, recordando que “hace poco era motivo de orgullo nacional”.

La Junta ha aprovechado esta nueva interrupción del servicio para volver a denunciar lo que considera un trato desigual en materia de inversiones por parte del Gobierno central. Según datos de la Intervención General de la istración del Estado correspondientes al primer semestre de 2022 —los últimos disponibles, según la Junta—, mientras que Cataluña recibió 1.295 millones de euros en inversiones ferroviarias por parte del Ministerio de Transportes, Adif y Alta Velocidad, Andalucía solo recibió 175 millones. Es decir, mientras que en la comunidad catalana se ejecutó el 87,5% de lo presupuestado, en Andalucía apenas se alcanzó el 12,8%.

Para el Gobierno andaluz, estos datos reflejan no solo un agravio puntual, sino un patrón sistemático de infrafinanciación que afecta al desarrollo económico y a la calidad de vida de los andaluces. Carolina España cuestionaba “para qué sirve tener una vicepresidenta andaluza en el Gobierno”, refiriéndose a María Jesús Montero, si “Andalucía sigue sin estar en la agenda del Ejecutivo”.

Por su parte, el Gobierno de España respondió a estas declaraciones acusando a la portavoz de “manipuladora”, haciendo un uso “descontextualizado de los datos”, con el objetivo de crear la confrontación entre territorios. De hecho, destacan que el año 2024 ha sido uno de récord en inversión de la istración central en infraestructuras, casi duplicando lo invertido por el último Ejecutivo popular de Mariano Rajoy en 2018. Para rematar, vuelven a destacar que Andalucía recibe más dinero que nunca, 53.800 millones más en los últimos 7 años.

El cese de Puente

La Junta sostiene que la falta de mantenimiento y de inversión está afectando directamente a la competitividad de la comunidad. Casos como el del “tren litoral”, que lleva años de retraso sin avanzar más allá de estudios de viabilidad, o la ausencia de conexiones ferroviarias eficientes con los principales aeropuertos andaluces, son citados como ejemplos del abandono que denuncia la istración autonómica.

En una carta reciente al ministro Puente, el consejero de Turismo, Arturo Bernal, ha reclamado medidas urgentes para desbloquear proyectos clave como la ampliación del aeropuerto de Málaga-Costa del Sol, la conexión ferroviaria con aeropuertos y la ejecución del tren litoral entre Algeciras y Málaga. Bernal señala que estas infraestructuras son esenciales no solo para el turismo, sino también para el desarrollo económico y la cohesión territorial de Andalucía. Como este, hay cientos de otros proyectos, como los que en su día incluyó la ahora expresidenta de la Junta, Susana Díaz. De hecho, fueron 669, para los que pedía financiación proveniente del Plan de Inversiones para Europa, iniciado en 2014.

Ahora, la consejera de Fomento, Rocío Díaz, ha recogido el testigo y desde el comienzo de esta segunda legislatura ha solicitado en numerosas ocasiones al ministerio distintos análisis y encuentros para abordar soluciones a los problemas de las conexiones o el seguimiento de las obras en ejecución. Algunas de ellas, como las que ya informó Vozpópuli.

Una nueva exigencia

La Junta de Andalucía achaca este caos ferroviario a Óscar Puente, tanto es así que el malestar institucional ha escalado lo suficiente como para que el Parlamento andaluz apruebe el cese del ministro. Será una Proposición no de Ley del Partido Popular, en la que acusan al titular de Fomento de "incompetencia reiterada" y de actuar con "falta de respeto" hacia los ciudadanos andaluces.

La iniciativa incluye también la petición de destitución de los responsables de Renfe y Adif, a quienes se culpa del “colapso técnico y operativo” de la red ferroviaria en la región. A todo esto se suma la reclamación compartida con otras comunidades “infrafinanciadas”, como la Comunidad Valenciana, Murcia y Castilla-La Mancha, de un nuevo modelo de financiación autonómica que corrija los desequilibrios actuales. Durante una reunión celebrada recientemente en Sevilla, los responsables de Hacienda de estas regiones coincidieron en que la fórmula vigente desde 2009 no responde a las necesidades reales de sus territorios.

De hecho, el Ejecutivo andaluz ya anunció que a la próxima Conferencia de Presidentes acudirán con la exigencia de abordar estas dos cuestiones. No obstante, la Presidencia del Gobierno ya ha confirmado que tienen otros planes para ese 6 de junio, ya que los temas que se plantean son el a la vivienda y la formación profesional y universitaria.

Mientras tanto, los s del ferrocarril en la comunidad siguen aguantando interrupciones, retrasos, averías y, de vez en cuando, servicios alternativos que se están convirtiendo en rutina.

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