El declive de la Educación en Cataluña sigue su curso. El último informe PISA demostró que la comunidad catalana se situaba a la cola de España y del resto de Europa en materias como Matemáticas, ciencias o comprensión lectoras. Y, según ha revelado hoy la 'consellera' de Educación y Formación Profesional de la Generalitata, Esther Niubó, la situación dista mucho de mejorar. Así, en una conferencia de Nueva Economía Forum, Niubó ha avanzado que los resultados de las pruebas de competencias básicas de 2025 "no serán los que nos gustarían". A este respecto, ha recordado que la caída en los resultados de los alumnos catalanes se remonta a 2015, según atestiguan pruebas como PISA y PIRLS. Siendo así, Niubó ha prometido que el Ejecutivo alineará "todos los recursos" para revertir dichos resultados.
De modo que, tras revelar que los malos resultados han vuelto a producirse en materias como matemáticas, ciencias y comprensión lectora, Niubó ha anunciado que su departamento adoptará medidas para reducir la inestabilidad de las plantillas y revisará la complejidad de los centros para asignar los recursos de manera más equitativa. Por otra parte, ha informado de que se fortalecerá la educación inclusiva durante el próximo curso con más de 550 nuevas dotaciones de docentes y personal. "Sabemos que hoy no todos los jóvenes en Cataluña llegan al final de la etapa de educación obligatoria con las herramientas que necesitan para desarrollarse plenamente", ha afirmado.
La apuesta por la educación inclusiva se ha hecho patente con la asistencia a la conferencia de la 'consellera' de Igualdad y Feminismo, Eva Menor. De hecho, entre los asistentes también se contaba el responsable de Política Lingüística de la Generalitat, sc Xavier Vila, cuya apuesta por el monolingüismo vehicular es otra de los constantes del sistema catalán, tanto de este Ejecutivo como del precedente. No obstante, un estudio reciente elaborado por expertos de la Universidad Camilo José Cela de Madrid avalaba lo que desde hace años denuncian entidades como la AEB. Esto es, que la inmersión lingüística afecta considerablemente al rendimiento de los alumnos catalanes, siendo sus resultados inferiores en "un curso escolar" a los de los estudiantes madrileños.